La semana pasada, para ser más precisos, el 5 de agosto, en el congreso estatal de Oaxaca, con 31 votos a favor se aprobó la prohibición de la venta de bebidas azucaradas y alimentos “chatarras” a menores de edad, con lo que dicho estado se convirtió en el primero en legislar esta medida que según sus promotores, busca la salud de las niñas, niños y adolescentes.
Una de las principales promotoras de dicha medida fue la diputada local por Morena, Magaly López, quien ha afirmado que la obesidad infantil es una pandemia en Oaxaca en donde 1 de cada 3 niños tiene sobrepeso, por ello fue que la decisión tomada en el Congreso local busca responder a esa problemática.
??La monstruosa industria de las #BebidasAzucaradas han empezado una campaña de desinformación, no caigas en sus engaños. @elpoderdelc @Contrapesomx @Desde_Izquierda @molotovmx pic.twitter.com/ndH1b42Td8
— Magaly López Domínguez (@Magaly_LopezOax) August 11, 2020
Sin embargo, el 10 de agosto la citada senadora López publicó en su perfil de twitter el siguiente mensaje en el que enfatiza que la medida no impacta a los dulces regionales, los panes, el tejate, la tlayuda, los chicharrones de la señora de la esquina, etc., lo cual levantó muchas suspicacias respecto a la legitimidad de la iniciativa aprobada en Oaxaca. Usuarios de la red social no se hicieron esperar con comentarios en los que cuestionan si los si los legisladores efectivamente buscan la salud de los niños o solamente han estigmatizado a las empresas de alimentos industrializados.
La ingesta calórica de los alimentos está definida por sus ingredientes, y no depende de si es un producto industrializado o no como lo plantea la senadora, sin embargo parece ser que no todos lo entienden así o que simplemente son medidas electorales que nada tienen que ver con dar solución a los problemas de salud pública que aquejan e nuestro país.