Por Guadalupe Romero
En las ocho estrofas, entre coplas y coros, de la popular ronda infantil “A la víbora de la mar”, también ocho veces se señala que todos pasarán “menos el de atrás”, incluso en dos ocasiones quien lidera el grupo pide expresamente que se deje pasar a todos sus hijos “menos el de atrás”. Así es, la historia de la humanidad confirma que “los de atrás” se quedarán.
En estos momentos en donde la incertidumbre aún prevalece y las oportunidades escasean, especialmente para los más vulnerables, la ronda infantil parece el justo balance de lo que pasa. Muchos dicen que se ocupan de evitarlo y otros tantos por sobrevivir en sus diferentes actividades (especialmente políticas) poco profundizan para salvar a los de atrás.
“Sí, los niños a la escuela, es urgente”, “cada uno debe hacerse responsable, las escuelas los esperan”… “Los niños ya necesitan regresar, ya vemos problemas muy fuertes de violencia, muy fuertes de obesidad, muy fuertes de estrés, por el bien de todos los pequeños", señaló la titular de la Secretaría de Educación Pública, la maestra Delfina Gómez, en su participación en las conferencias matutinas encabezadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El presupuesto que ya se respira
La realidad es que se debe reafirmar que las escuelas lejos están de ser guarderías, su función innegable es social, sí pero la esencia es el cumplimiento del derecho a la educación que tenemos y que por obligación el Estado mexicano tiene que cumplir. Nadie debe quedarse atrás en el desarrollo de capacidades, conocimiento y cultura, es un derecho cuya satisfacción más inmediata, y fácil, sea esa: asistir a una escuela. "Si no vas, ya es tu responsabilidad, nadie te puede obligar", escuchamos toda la semana pasada.
Upps… en tiempos de pandemia Covid- 19 hemos tenido año y medio para pensar, estructurar y proyectar qué otras alternativas existen de educación para cumplir con el mandato del Artículo 3 Constitucional. Pero qué pasa, apenas estamos terminando un decálogo del “regreso seguro a las escuelas”, donde aún no se atina en concretar la necesidad u obligatoriedad de firmar y entregar una carta responsiva de sanidad de los niños y claro la automática responsiva de las consecuencias de la decisión.
En consecuencia se iniciarán las clases presenciales este 30 de agosto con un decálogo de nueve puntos sugeridos al restarle la obligatoriedad de la carta responsiva.
Y lo peor. En 2020 el presupuesto para la SEP, en plena pandemia, sin vacunas, actividades cerradas, desempleo y menor poder adquisitivo, momentos en los que las escuelas fueron vandalizadas y sus pocos activos perdidos, reconocen las autoridades, apenas se otorgó un aumento de 24 mil 572 millones de pesos. Es decir, se pasó de una partida federal en 2019 de 300 mil 140 millones 250 mil pesos, a 324 mil 712 millones 616 mil pesos.
Y del año pasado, para este aún con escuelas sin ocupar, carentes de servicios, infraestructura y mobiliario, el aumento en el presupuesto federal apenas fue de 13 mil 138 millones 825 pesos. Dinero en su mayoría para nóminas y administración; los planteles apenas recuperan su estado hasta antes de la pandemia y los que ni agua tienen siguen sin el recurso, quizá con el recién anunciado programa “La escuela es nuestra” se empezarán atender.
Falta ver que en el Proyecto de Egresos de la Federación 2022 el aumento para la educación sea considerable y alcance para todos los pendientes acumulados… aunque los analistas anticipan que será de apenas 3.2%; es decir, pasará de 337 mil 851 millones 440 mil 847 pesos, a un aproximado de 348 mil 851 millones 440 pesos. Así de concreto, ante los recortes y la disminución de ingresos federales el presupuesto para la educación para el próximo año se prevé solo se incremente en alrededor de 11 mil millones de pesos.
Menos para más necesidades derivadas de la aún vigente pandemia y los requerimientos urgentes que hacen fila en la tramitología de la federación. En 2020, el aumento fue de más de 24 mil millones; en 2021, de poco más de 13 mil millones, y para 2022, si los pronósticos se cumplen de 10 mil millones de pesos y pico. Cada vez menos para más.
Y solo para que no te lo preguntes y no dejar. Para este año la Secretaría de Turismo fue la que recibió el incremento más grande en su presupuesto. Creció siete veces lo adjudicado en 2020, pasó de 5.2 mil millones a 38.6 mil millones de pesos en 2021. Recursos que se encaminaron para la implementación de acciones en torno a la construcción del Tren Maya y los Proyectos Turísticos Integrales (PTIs) como detonadores del sector.
Ya nos enteraremos de los resultados y de la transparencia de los recursos utilizados, así como los que no se pudieron ejercer.
México, país menos educado
En el más reciente reporte del Coneval (Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social), documento sin desperdicio para nuestra mala suerte, se puede leer que entre 2018 y 2020, el número de mexicanos con rezago educativo pasó de 23.5 a 24.4 millones.
De acuerdo con Mexicanos Primero, antes del Covid-19 existía un rezago educativo de 52%; no obstante, tras las restricciones producto de la emergencia sanitaria el déficit pasó a 75%.
“El que se vaya a 75% significaría como una especie de retroceso de tres ciclos escolares. Como si nos fuéramos atrás en el tiempo tres años. Es sólo una medida de referencia, pero se puede ver muy claro. No sólo los estudiantes de 10 años que no logran aquello que es deseable, esperable que es su derecho a los 10 años, sino que tampoco lo logran aquellos que están en 15 años.”
Qué fuerte el análisis de Mexicanos Primero, pero nada sorprendente por lo que la pregunta sigue siendo la misma si hemos estado en condiciones de pandemia año y medio, por qué se dejó de trabajar en nuevas formas de garantizar la educación como derecho constitucional y obligación del que asume la administración federal. ¿Por qué hasta ahora se está pensando en un decálogo de cómo regresar a clases presenciales? Y ¿por qué los recursos para la educación se escatiman y sobre el imperativo se privilegian proyectos faraónicos sexenales?
Remanentes
Se retoma la actividad y los foros de calibre. El octavo foro de materias primas “Panorama global del mercado de resinas 2022”, organizado por la Asociación Nacional de Industrias del Plástico (Anipac), que preside Aldimir Torres Arenas, se celebrará el 26 de agosto. De manera virtual se hablará de la situación actual y expectativas del mercado de las materias primas plásticas, en México y el mundo, por lo que, se contará con expertos en economía, política y análisis de mercado como Terry Glass, de Plásticos de Norteamérica IHS Markit; Luis Carlos Ugalde, de Integralia Consultores; Bob Masterson, de Chemistry Industry Association; Patrick Krieger, de Plastics Industry Association; Rolando Ocampo, de la División de Estadística de la CEPAL, y Arturo Hoyo, presidente de la Sección de materias primas de las Anipac, entre otros.
Sin olvidar, hay elecciones en Concamin
Quienes están cerrando filas alrededor del proceso de unidad en Concamin son los integrantes del Sector Mexicano de la Moda los cuales este lunes públicamente se pronunciaron vía redes sociales para reconocer el proceso transparente y democrático que está por llevarse a cabo al interior de la Confederación de industriales para renovar su presidencia que hasta el 24 de septiembre encabeza Francisco Cervantes.
Los integrantes de este sector, entre los que se encuentran la Cámara Nacional de la Industria del Vestido, la Cámara Nacional de la Industria Textil y la Cámara Nacional de la Industria del Calzado, entre otras, afirmaron en su posicionamiento que las acusaciones contra Cervantes y Concamin por presunta falta de transparencia y equidad en el proceso de elección, son hechas a la ligera y carecen de fundamentos y solamente buscan generar encono y división, en momentos en los que el país necesita unidad y compromiso.
Mientras se mueva, diría Sancho a Don Quijote, “señal que cabalgamos”.