Qué sabor tiene el azul?

A que huele el rojo?

Así, es como sabe el verde…

¿Se lo han preguntado? Por más imaginación que se tenga seria muy disperso pensar en una respuesta que nos satisfaga a todos. Sin embargo existe gente que lo sabe ciertamente: La gente que tiene sinestesia. Ellos mezclan sus sentidos: Pueden ver el color de las letras y los números, ven de colores las notas musicales como si fueran colores, pare ellos 7 + 2 podría ser igual a rojo, o Eric Clapton podría tocar en verdes.

Estas, son experiencias que se pueden sentir, gracias a este fenómeno neurológico involuntario en el cual se experimenta una sensación secundaria: Letras o colores son percibidos con colores específicos, dándoles una personificación y personalidad propios. La sinestesia está presente en una de cada 20 mil personas y su intensidad y categoría puede variar, además se dice que es hereditaria; la sinestesia también ha sido reportada en individuos bajo la influencia de drogas sicodélicas, después de un fuerte golpe o como consecuencia de la ceguera o sordera. Aparentemente la sinestesia involucra nuevas sensaciones a los sentidos conocidos.

Muchos sinestéticos usan sus experiencias como ayuda en sus procesos creativos. Una de las formas más comunes de sinestesia, es la del color, en donde letras o números, por sí solos o formando grafemas, son teñidos con color:

Así es como ve un sinestético las letras y números.

Con el sonido, sucede lo mismo: la sinestesia responde con tonalidades diferentes los estímulos auditivos, estas coloridas experiencias aparecen cuando se escucha una obra musical o sonidos aislados. El color cambia en respuesta a los diferentes acordes musicales. Se imaginan eso?

La sinestesia gustativa existe en individuos que saborean palabras y reciben esa sensación de sabor en la boca al leer un texto. Si fueras sinestético podría saborear las siguientes palabras:

“Pavo preparado con Stephanie y servida con tiras de civismo, acompañados de Londres y actuaciones con sindicatos y una guarnición de frescos microscopios. De postre ciudad y para terminar, una taza de confesión.”

Para estas personas, la palabra "Stephanie" esta relacionada con el sabor a hierba, civismo con carne asada, "Londres" con papas, "actuación" con chicharos, "sindicato" con cebollas, "microscopio" con zanahorias, "ciudad" con pastel de carne y "confesión" con café.

Con sinestética se observaría con mayor facilidad la diferencia entre números.

El uso de la sinestesia en el arte puede ser observado en diferentes disciplinas: música, artes visuales, animación, poesía, multimedia, etc.

Muchos artistas quizás fueron especiales por ser sinestéticos:

Duke Ellington decia: “Cuando escucho una nota, veo un color, escucho esa misma nota en otro músico, y es otro color: si Harry Carney (saxofonista barítono de su banda) toca la nota re, es azul marino, si Johnny Hodges (saxofonista alto) la está tocando; ¿es azul cielo”. Cuando Duke Ellington decía esto, la gente creía que estaba bromeando.

Charles Baudelaire escribió sus poemas basado en su experiencia sinestética.

Frank Liszt le pedía a su orquesta que tocara un poco más “azul” o “no tan rosa” Ellos nunca supieron que él se refería a los colores como a los tonos.

Vladimir Nabokov, escribió su obra El Regalo en un tono verde combinado con violeta, escribir en amarillo, lo exaltaba mucho, decía.

Tom Yorke de Radiohead, Arthur Rimbaud, Manu Katche y Eddie Van Halen, son otros sinestétas famosos. Todavía se esta estudiando casos como el de Syd Barret y Jimi Hendrix.

A pesar de que este fenómeno fue estudiado por primera vez entre la comunidad científica en  1880, fue hasta 1980 que hubo una investigación más amplia, principalmente en Estados Unidos e Inglaterra, hoy en día existen organizaciones internacionales dedicadas al estudio de la sinestesia e incluso existe una pagina de Internet donde se puede hacer una prueba para saber si uno es sinestéta.

¿Será este fenómeno una cualidad del hombre en el futuro? ¿Seremos más sensibles y por lo tanto más reales como especie? En este aspecto la sinestesia es de alguna manera una experiencia mucho más rica y real que la de cualquier persona. Por ello se cree que así serán las personas del futuro, podrán tener una realidad más plena y aprovechar cualquier experiencia de la mayor forma posible: Se pretende que uno pueda tener en la memoria el olor, el color, el sabor y la definición de cada momento de nuestras vidas, una definición más exacta de una experiencia particular. Así sabríamos a que huele el otoño, a que sabe nuestra novia o de que color es la tristeza.