Carlos Vela, conocido como el "Bombardero de Cancún", es considerado uno de los futbolistas mexicanos más talentosos de su generación. A lo largo de casi dos décadas, dejó una huella imborrable en el fútbol internacional, destacando por su técnica, visión de juego y capacidad goleadora. El 27 de mayo de 2025, a los 36 años, Vela anunció su retiro del fútbol profesional, cerrando una carrera llena de éxitos, controversias y momentos memorables.
El talento que conquistó el mundo desde joven
Carlos Alberto Vela Garrido nació el 1 de marzo de 1989 en Cancún, Quintana Roo, México. Desde temprana edad, mostró un talento innato para el fútbol. A los 15 años, se unió a las fuerzas básicas del Club Deportivo Guadalajara (Chivas), donde comenzó a pulir sus habilidades. Sin embargo, nunca debutó con el primer equipo de Chivas, ya que su destino cambiaría drásticamente tras un evento que lo catapultó a la fama mundial.
En 2005, con tan solo 17 años, Vela fue la figura estelar de la Selección Mexicana Sub-17 que ganó el Mundial de la categoría en Perú. Anotó cinco goles, incluido uno en la final contra Brasil (3-0), lo que le valió el título de máximo goleador del torneo y la Bota de Oro. Su desempeño llamó la atención de clubes europeos, y ese mismo año, el Arsenal de Inglaterra lo fichó, marcando el inicio de su aventura en el fútbol de élite.
Un nómada del fútbol que brilló en Europa y la MLS
La carrera de Vela en Europa comenzó con retos. Debido a problemas con el permiso de trabajo en Inglaterra, el Arsenal lo cedió a varios clubes para que ganara experiencia. Entre 2006 y 2011, jugó en el Celta de Vigo, UD Salamanca, CA Osasuna y West Bromwich Albion. Aunque mostró destellos de calidad, como su primer gol en LaLiga con Osasuna en 2007, no logró consolidarse como titular en estos equipos.
El punto de inflexión llegó en 2011, cuando Vela fue cedido a la Real Sociedad de España. En San Sebastián, encontró su lugar. En la temporada 2011-12, se convirtió en una estrella del equipo, y su traspaso permanente en 2012 marcó el inicio de su etapa más exitosa en Europa. Durante seis años, disputó 250 partidos, anotó 73 goles y dio 43 asistencias, ayudando al club a clasificar a la UEFA Champions League en la temporada 2012-13. Su sociedad con Antoine Griezmann y su estilo desparpajado lo convirtieron en ídolo de la afición donostiarra, siendo elegido Jugador del Año del club en 2011-12 y 2013-14.
En 2018, a los 28 años y en plena madurez futbolística, Vela tomó una decisión que sorprendió a muchos: dejó la élite europea para unirse al Los Angeles FC (LAFC), un equipo de expansión en la Major League Soccer (MLS). Como el primer fichaje en la historia del club, Vela se convirtió en su capitán y máximo referente. En su primera temporada, guió al equipo a los playoffs, y en 2019 rompió el récord de goles en una temporada de la MLS con 34 tantos, ganando el MVP de la liga y la Bota de Oro. Con LAFC, conquistó la MLS Cup (2022), dos Supporters’ Shield (2019, 2022) y la U.S. Open Cup (2024). En total, jugó 189 partidos, anotó 93 goles y dio 54 asistencias, consolidándose como la máxima leyenda del club.
Un legado de títulos y récords
La carrera de Vela está repleta de logros tanto a nivel de clubes como con la Selección Mexicana:
Con la Selección Mexicana:
Campeón del Mundo Sub-17 en 2005 (Bota de Oro con 5 goles).
Dos Copas Oro (2009, 2015) y una Copa Concacaf.
Participación en dos Copas del Mundo (Sudáfrica 2010 y Rusia 2018), con 72 partidos y 19 goles en total con el Tri.
Con clubes:
Real Sociedad: Clasificación a la UEFA Champions League (2012-13), Jugador del Año (2011-12, 2013-14).
LAFC: MLS Cup (2022), Supporters’ Shield (2019, 2022), U.S. Open Cup (2024), MVP de la MLS (2019), Bota de Oro (2019) y récord de goles en una temporada (34).
Récords individuales:
Máximo goleador histórico de LAFC (93 goles).
Máximo asistente histórico de LAFC (54 asistencias).
Récord de goles en una temporada de la MLS (34 en 2019).
Un talento incomprendido
A pesar de su talento, Vela fue una figura polémica. Su relación con la Selección Mexicana estuvo marcada por desencuentros. En 2010, fue suspendido por seis meses tras una fiesta en un hotel de concentración. Más tarde, en 2014, rechazó participar en el Mundial de Brasil, argumentando motivos personales y afirmando que no se sentía cómodo. Esta decisión, junto con su declaración de que prefería el básquetbol al fútbol, generó críticas en México, donde algunos lo acusaron de falta de compromiso. Sin embargo, Vela siempre defendió sus decisiones, priorizando su felicidad y bienestar personal.
En 2018, tras el Mundial de Rusia, donde anotó un gol contra Corea del Sur, anunció su retiro definitivo de la Selección Mexicana para dar paso a nuevas generaciones. Su relación con el Tri dejó un sabor agridulce, ya que muchos creían que su talento pudo haber marcado una diferencia mayor en torneos internacionales.
El retiro
El 27 de mayo de 2025, Carlos Vela anunció su retiro del fútbol profesional a través de un emotivo mensaje en redes sociales: “A lo largo de mi carrera he vivido momentos muy especiales, pero ha llegado el momento de oficialmente retirarme del fútbol profesional. No hay palabras suficientes para expresar el agradecimiento que tengo por mi familia, todos los clubes que me dieron la oportunidad y a la afición por su apoyo y cariño. Ha sido un honor y un privilegio compartir mi carrera con todos ustedes”.
El anuncio llegó tras seis meses de inactividad, luego de que su contrato con LAFC expirara en diciembre de 2023. Aunque regresó brevemente al club en septiembre de 2024, jugando apenas cinco minutos y contribuyendo a la conquista de la U.S. Open Cup, Vela decidió cerrar su carrera. LAFC lo nombró su primer embajador oficial, y el 21 de septiembre de 2025, será homenajeado en la “Noche de Carlos Vela” durante un partido contra Real Salt Lake.
Legado
Carlos Vela deja un legado imborrable como uno de los futbolistas mexicanos más talentosos del siglo XXI. Su capacidad para cambiar partidos con su zurda, su visión de juego y su desparpajo lo convirtieron en un ícono en la Real Sociedad y LAFC. Aunque su relación con el fútbol mexicano fue compleja, su impacto en el deporte es innegable. Como embajador de LAFC, seguirá inspirando a futuras generaciones, demostrando que el éxito no solo se mide en trofeos, sino en la autenticidad y la felicidad con la que se vive la carrera.